El pasado domingo 25/11/2018 celebramos la tercera ruta de la temporada 2018/2019 del Grupo de Senderismo Claret, en esta ocasión con la espectacular ruta de Rompeserones, que nos conduciría desde el Pico de Las Nieves hasta el casco histórico de Santa Lucía de Tirajana.
Como es habitual, nos reunimos en el aparcamiento de la sección de Tamaraceite a partir de las 08:30h, partiendo en guagua los 12 senderistas inscritos que finalmente aparecieron a las 08:55h y llegando a nuestro punto de partida una hora más tarde, para iniciar la ruta a las 10:15h con un completamente despejado y fresco día.
Iniciamos la ruta disfrutando del espectáculo que nos brindaba encontrarnos en el punto más alto de la isla, que no es el Pico de Las Nieves, dato arraigado popular e históricamente, sino el Morro de la Agujereada. Gracias al día que hacía, nos admiramos contemplando Tenerife, donde se distinguía perfectamente Santa Cruz, La Laguna y otros pueblos, La Gomera y toda la mitad "inferior" de Gran Canaria, desde Arinaga y Vecindario en la costa Este, el Roque Nublo en mitad de la Caldera de Tejeda, el macizo de Tamadaba en la zona Oeste de la isla, y pasando por las dunas de Maspalomas o Arguineguin en la costa Sur.
Emepzamos a caminar dirigiéndonos hacia el Morro de la Agujereada desde donde nos encaminamos hacia uno de los 3 pozos de las nieves existentes en la zona, en concreto el Pozo Grande. Desde allí enfilamos hacia el Pico de la Gorra desde donde descendimos ya hacia la zona de Los Cascajales y la Mesa de las Vacas, pasando por la Cruz del Socorro y la Cruz de la Helada, antes de alcanzar el inicio del vertiginoso descenso a Taidía de Rompeserones.
En este punto las nubes nos alcanzaron y cubrieron, dejándonos sin poder contemplar el tremendo paisaje de la Caldera de Tirajana presente durante todo el descenso. Aún así, se disfrutó del descenso y más en el tramo final del mismo al salir por debajo de las nubes. Alcanzado el final de este tramo, ya en la zona de Taidía, descansamos y repusimos fuerzas tomando buena cuenta del almuerzo.
A partir de aquí, iniciamos el último tramo de la ruta que nos condujo, a través de fincas y antiguos sembrados abandonados, hasta alcanzar el Lomo de Madrid Bajo, justo encima del casco histórico de Santa Lucía de Tirajana. Desde ese punto, en un rápido descenso, llegamos a la plaza de la iglesia dando por finalizada la ruta tras 12 kilómetros y 5:30 horas con un merecido refrigerio en uno de los restaurantes de la zona antes de subirnos a la guagua para regresar al colegio.
Puedes ver la memoria gráfica de la ruta en estos enlaces: