El domingo 29/03/2015 realizamos la sexta ruta del Grupo de Senderismo Claret del curso 2014/2015, caminando en esta ocasión desde la zona de la Cruz de San Antonio, junto a la presa de la Cueva de Las NIñas, hasta el barrio de Molino de Viento en Mogán, a través de la Montaña y rampa de Tauro.

Como es habitual nos reunimos en el aparcamiento de la sección de Tamaraceite a partir de las 08:30h. En esta ocasión nos juntamos 18 senderistas que partimos en guagua a las 09:05h. Hora y media más tarde llegamos a nuestro punto de partida, iniciando la ruta a las 11:05h en un precioso, despejado y ya no tan fresco día.

Iniciamos la ruta cruzando los Llanos de la Majada Alta rumbo a la pequeña presa del Salto del Perro, donde realizamos un primer descanso con reposición de fuerzas, antes de iniciar el duro ascenso a la cima de la Montaña de Tauro. Tras un buen rato y mucho sudor de por medio, alcanzamos la cima y pudimos disfrutar de un paisaje espectacular de todo el centro, Sur y Oeste de nuestra isla, con la guinda de Tenerife y el Teide nevado de fondo: el Roque Nublo, las cimas del Campanario y el Puntón de la Agujerada, las grandes presas (Cueva de Las Niñas, Soria y cuenca de Chira), el macizo de Inagua, Ojeada y Pajonales, la Montaña de los Azulejos, los picos de Mogarenes y Los Cedros, los barrancos de Mogán y Veneguera y, al fondo, las Dunas de Maspalomas y el Océano. Y todo esto junto al yacimiento aborigen del Almogarén de Tauro.

Continuamos camino, iniciando un descenso que ya no abandonaríamos hasta el final de la ruta, bordeando la falda Suroeste de la montaña, hacia el borde del Barranco de Mogán. Alcanzado este borde, en una atalaya que domina los impresionantes (y no es ninguna exageración) riscos que se desploman verticales hacia Mogán, hicimos la parada del almuerzo. Repuestas las fuerzas, continuamos el descenso por la rampa de Tauro, la divisoria que desciende desde la Montaña homónima hacia la costa entre los barrancos de Mogán y Tauro. Al llegar al cruce de Cortadores, continuamos descendiendo, a través de los Llanos del Guirre, en dirección a la Degollada de las Lapas y el inicio del Paso de los Laderones. Este tramo de la ruta, si bien no implica ninguna dificulta técnica, se hizo duro por la aridez y monotonía del paisaje y el amigo Lorenzo.

Alcanzada la Degollada de las Lapas, pudimos contemplar, y asombrarnos, el inicio del vertiginoso camino del Paso de los Laderones, último tramo de la ruta en la que, en solo 1.500 metros de recorrido, descenderíamos 500 metros de desnivel hasta alcanzar nuestro destino final. Desde la Degollada el paso parece insalvable, pero una vez iniciado el descenso comprobamos que no es así. Es un sendero impresionante, estrecho y muy aéreo, desde luego nada recomendable para personas con vértigo, pero muy seguro en buenas condiciones climáticas. Tras un primer tramo de descenso muy pronunciado, el sendero recorre más o menos horizontalmente el andén pegado a los caideros verticales bajo los llanos por los que habíamos caminado previamente. El andén nos conduce al último tramo del descenso, un enorme y pronunciado zig-zag de terreno más suelto que nos conduce definitivamente hasta el barrio moganero de Molino de Viento, donde, en una frutería, con unas buenas cervecitas y refrescos bien fríos, dimos por finalizado la ruta tras 13km y 7:30h de recorrido.

Puedes ver la memoria gráfica de la ruta en estos enlaces:

• Dani Santana
• Alejandro Suárez